jueves, 21 de mayo de 2015

Being a MadMen (guía de estilo para vintageros)



Mad Men acaba de terminar (después de 7 temporadas), y aunque muchos esperábamos un final más dramático que hiciera justicia a las miles de teorías sobre la serie jugando a entrelazarse con la vida real, el final más bien terminó por atar los cabos sueltos en los personajes centrales.

Lo más rescatable de la serie es que pasa a través de las décadas más emblemáticas para el diseño (de interiores, de moda, gráfico), el arte y la publicidad. Los personajes envejecen en pantalla, se ve la transición de publicidad impresa al mundo de la televisión, la inclusión de las mujeres en un mundo donde los hombres tenían el control absoluto en materia creativa, e incluso vemos cómo las entonces llamadas minorías van siendo toleradas (y aceptadas) en la sociedad estadounidense.

Así que daremos un repaso rápido sobre lo que MadMen nos enseña de moda y estilo para hombres.



Dicen por ahí que no importa lo que lleves puesto sino cómo lo lleves. Puedes usar el mejor traje a la medida, pero si no lo llevas con actitud, no sirve. Don Draper nos enseñó que el accesorio perfecto es tener cara de -saber lo que estás haciendo, siempre-, tener seguridad y con ello, lo que sea que uses se verá bien.





El Preppy Look siempre estará de moda, se vale y lo vale. Ser joven no tiene que ser sinónimo de vestir mal, yo sé que es fácil caer en lo trendy por querer ser divertido, pero vestir como Justin Bieber a tus veintitantos (casi treintas) ya no está tan padre. Sino me creen pregunten a su fémina de confianza, ésa que le gusta la moda, no a la que también viste como muchachita YOLO-SWAG.




Por el lado contrario, ser mayor no es ser aburrido y es muy cierto eso de dress your age; pero sobretodo en México (y Latinoamérica), al envejecer ocurre de dos sopas: o nos olvidamos del gusto por la moda y nos ponemos lo que sea, o tratamos de quitarnos edad vistiendo como todo un chavorruco, pintándose las canas y tratando de encajar con las nuevas generaciones en vez de mostrar lo aprendido en la vida. Los dos dueños de Sterling-Cooper nos enseñan que la mejor opción es lo sobrio, pero que el diablo está en los detalles, cómo los usas y como juegas con ellos a tu favor.





¿Pelo largo? ¡sí! ¿barba? también, pero cuidada ¿colores alegres? ¿mezclar texturas? ¿armazones de todo tipo? Sí, sí y ¡sí!. Los creativos de MadMen no le temen a experimentar, usan drogas, visten como quieren, juegan en la oficina y han marcado estilos muy rescatables de las últimas décadas. La moda debe ser divertida de usar, y en el camino a encontrar el estilo propio y único de cada quien, es indispensable no tenerle miedo al ridículo y jugar a ser alguien más es una forma fácil de hacerlo.



Para aprender y crear primero se empieza por imitar. Los italianos son arriesgados por naturaleza al vestir y se ve bien. Los ingleses poseen un estilo nato completamente clásico desde el acento. Así que hay que voltear a otros lugares, ver cómo combinan su ropa, buscar inspiración y tomar detalles que nos hagan sentir cómodos y podamos adaptar a nuestro guardarropa. Sal Romano siempre fué sofisticado y muy elegante, mientras que Pryce no perdió su british style ni en medio de una pelea a puño cerrado. Inspírense, tomen paletas de color, tomen ideas de accesorios y cómo llevarlos, no se van a arrepentir.




Y por último: ¡enjoy being a man! (aunque suene trillado). Disfruta un buen trago solo o acompañado, lee, conduce un auto sólo por que sí, forma una familia poco convencional y disfrútala, escribe una carta a la manera tradicional, sé interesante para los niños pequeños e intenta ser un modelo a seguir de alguien, comparte lo que sabes con los demás y sobre todo sé gentil con las mujeres, que ser hombre no es igual que ser machista. Aléjate un poco de la tecnología y usa tus manos para resolver problemas. En conclusión, sé old school por un rato, como si estuvieras en MadMen.







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